dueña

dueña de mi corazón,

terrateniente de mi cuerpo,

sórdida locura de mi alma,

te llevaste en las manos,
mi alegría,
mi goce,
mi sentir.

Carlos Alonso de Celada

mas

tengo tanto para darte...

Alonso

tanto

tenía tanto para darte...

Alonso

serás vos?

1 , 2 , 3 . . .tus pasos en la escalera

tu pequeño pie

los escalones

y su voz de madera...

todavía creo verte llegar.

Carlos Alonso de Celada

tus ojos

Fue ese eclipse total
el que tornó mi vida sombría,
él me sumió en la soledad.

Tus ojos ya no me miran,
como hacer para recordarlos,
y no sentir dolor.

Verdes unas veces,
grises otras,
me encendían, me abrasaban.

Difícil vivir sin ellos,
cerraré los míos,
para no verme llorar.

Carlos Alonso de Celada

raso-púrpura

El pañuelo de raso negro
que tapaba tus ojos verde-grises de gata.
las sábanas serpenteaban tu cintura
arrodillada en la cama
como una diosa bajada del Olimpo.

La tenue luz de la habitación
dibujaba tu silueta.
nunca mas te volví a ver así.
nunca mas te volveré a ver.
nunca mas beberemos de la copa púrpura.

Carlos Alonso de Celada